LUNES DE NEGOCIOS: Enfoque en Blue Q: una revolución cultural con Cat

Aug 31, 2023

En una era en la que la "cultura corporativa" es cada vez más apreciada como un medio para atraer inversores, empleados y clientes, nunca podría haber un mejor momento para tener nuevas ideas sobre la forma en que conducimos nuestra sociedad en el lugar de trabajo. Los señores Nash los tienen a raudales.

Guerreros de la contracultura El antropólogo social, filósofo y pionero psicodélico Terrence McKenna una vez opinó que "la cultura no es tu amiga". Desde éxitos de taquilla militaristas, hasta música pop corporativa bombeada por supermercados hasta lujos de diseño inasequibles producidos con trabajo infantil (te estamos mirando, Big Tech), ¿qué tan saludables son nuestra sociedad y sus productos?

La misma palabra "cultura" recuerda una masa de bacterias pululando por la superficie de agar rojo carmesí ardiente de una placa de Petri, como un infierno microscópico evocado por Hieronymus Bosch en un ataque característico de fantasía medieval. Por otra parte, tal escenario de abundante actividad nos dio la penicilina, que ha salvado decenas de millones de vidas. Y en lo que respecta a la cultura humana, gracias a Dios por Dostoyevsky, Da Vinci, el alunizaje, "El Padrino" y el "Baghavad Gita" para empezar. El doble filo de esta "espada cultural" es quizás la razón por la que seguimos volviendo a la armería; tal vez cuando esta hoja se maneja con ingenio y apunta hacia el progreso, puede ser un vencedor de los problemas del mundo, en lugar de un medio para llenar depósitos de chatarra y capturar una nueva generación de trabajadores explotados criminalmente.

Esto es de lo que más quieren hablar los hermanos Seth y Mitch Nash, propietarios, gerentes y gurús de la empresa de regalos Blue Q, con sede en Pittsfield. En una era en la que la "cultura corporativa" se aprecia cada vez más como un medio para atraer inversores, empleados y clientes, o se presenta como una razón por la cual una empresa debe cambiar y adaptarse a los tiempos (o cerrarse para siempre), nunca podría Será un mejor momento para tener nuevas ideas sobre la forma en que conducimos nuestra sociedad en el lugar de trabajo. Los señores Nash los tienen a raudales.

Groupies del hombre azul

Blue Q diseña predominantemente regalos como calcetines, monederos, delantales de cocina y bolsos adornados con imágenes y textos subversivamente adorables. La compañía comenzó cuando los hermanos fundadores comenzaron en sus apartamentos en el South End de Boston en los años 80, inspirados por el negocio de fabricación con sede en Pittsfield de su padre y la pasión de su madre por el arte y el diseño. En las décadas intermedias, los alegremente irreverentes hermanos han construido una marca querida y reconocida internacionalmente, con éxitos como la mascota instantánea de cartón plegable "Flat Cat", una interpretación icónica de Chapstick apodada "Lip Sh*t", una delantal de cocina que representa a una mujer sentada a horcajadas sobre un caimán que sugiere "Haz algo todos los días que asuste a tu familia", y adiciones recientes como una nueva línea de hierba gatera, un modelo en particular que representa a un felino mirándose fijamente en un espejo y preguntándose a sí mismo en sus pensamientos. forma de burbuja, "¿Por qué mato?". Seth, Mitch y el equipo titularon este "Gatito existencial", que está bordado sobre el gato que mira al espejo en la bolsa llena de pezones.

La sensibilidad Puckish que guiña un ojo que sustenta todo lo que hacen Seth y Mitch no es nada sin el personal que respalda su visión y lo hace posible, y los hermanos lo saben. A diferencia de Willy Wonka, quien ciertamente hizo todo lo posible para tratar de hacer que la megalomanía fuera divertida, Seth y Mitch están comprometidos con una visión más democrática de la creación caprichosa, y eso se nota de inmediato; cuando este reportero entró por primera vez en sus oficinas en busca de los hermanos Nash, un miembro del personal se levantó de su escritorio y se acercó como el anfitrión en un cóctel, entablando una conversación locuaz conmigo sin asomo de falta de sinceridad, prisa o, de hecho, alguna interpretación de esa pregunta omnipresente "¿puedo ayudarte?", que invariablemente se traduce como "¿qué diablos estás haciendo aquí y cómo puedo deshacerme de ti?" Mientras charlábamos, le pregunté acerca de trabajar en Blue Q, y su respuesta fue de un alivio encantado: alivio de que no tiene que trabajar en ningún otro lugar. No es que cualquier otro lugar sea tan malo, sino que Blue Q es tan bueno. Apenas había comenzado a experimentar la sensación de alegría y pertenencia que experimenta aquí cuando los hermanos irrumpieron y me saludaron.

Que este sentido de cohesión comunitaria y pura amistad sea tan inmediatamente palpable se debe a que Seth y Mitch lo aprecian por encima de casi cualquier otro aspecto de su trabajo, con el negocio esencial de generar nuevas ideas para la empresa democratizado y dispuesto a lo largo de un lateral. en lugar de una estructura jerárquica que tiene en cuenta a todos y otorga derechos al grupo. Mitch explica: "Tenemos estos, los llamamos sesiones de tarjetas didácticas, toda la oficina estará involucrada, y escribimos cada frase en una tarjeta didáctica de 4×6 y luego las colocamos en el piso, las movemos a una 'buena' y una pila 'mala', pero al menos tenemos a todos detrás de lo que vamos a hacer". La "oficina" a la que se refiere Mitch es un espacio de almacén convertido, voluminoso y ventilado, una o dos escaleras por encima del piso de embarque repleto de artilugios, que también está adornado con varios murales y obras de arte por miembros del personal de Blue Q, que podrían ser visto empacando un artículo mientras está parado directamente debajo de su propio arte de pared. La oficina diáfana y llena de luz en el piso superior permite viajar fácilmente por la habitación y hasta los escritorios de los colegas, que están adornados con hermosas (y ordenadas) colecciones de efímeros creativos.

Mitch amplía los comentarios de su hermano: "Tenemos una cosa de la empresa llamada 'El informe semanal', por lo que cada departamento comparte lo que está pasando, hay una plantilla para ello y les mostramos a todos en qué estamos trabajando para que estén actualizados y puede asegurarse de que no haya nada que nadie odie. Recientemente diseñamos y pagamos una nueva bolsa; cuando apareció en el informe semanal y el departamento de ventas vino y dijo que no les gustaba, dijimos "no hay problema, vamos a hacer otro". El miembro del personal Sheri Esko amplía el valor de este sistema: "Una de mis primeras 'sesiones de tarjetas de memoria' de desarrollo de productos fue probablemente alrededor de un mes después de mi empleo en Blue Q. Todos se reúnen y revisan ideas recientes para varios productos. Fue una experiencia muy divertida y me sentí cómodo dando comentarios e ideas. Es fantástico que toda la empresa colabore en el desarrollo de productos y el equipo (de desarrollo de productos) agradece y valora los aportes". A Mitch le apasiona tanto dar derechos a su personal de esta manera que apenas puede quedarse quieto mientras comparte sus convicciones: creo que a veces la gente entra y mira aquí donde se están haciendo todos estos proyectos y dice 'oh, ¿es esta la parte creativa de Blue Q?' Y yo estoy como 'raghhhrghhhhhh!!!", como 'no, en realidad queremos que todos aquí sean creativos', porque todos son creativos, todos necesitan sentir que pueden crear algo y construir algo y contribuir con algo y no solo ser un robot."

Los hermanos no hacen todo esto por los puntos de Brownie y el buen ánimo: un personal feliz y una base de clientes satisfecha también son autoprotectores. Además, los representantes a cargo de vender realmente lo que Seth y Mitch dieron luz verde para la producción pueden hacer un trabajo mejor y más eficiente cuando aprecian y entienden los productos que están vendiendo. Seth explica: "Cuando enviamos muestras a todos los representantes de ventas, reciben todos los comentarios de las tiendas y nos los envían a nosotros. Por lo general, tienen buen sentido y venden en todo el país, por lo que algo que es un poco nervioso en el noreste o en las costas, el medio oeste puede desaprobar... no les gusta la palabra "hijo de puta", y a veces tenemos demasiadas palabrotas y dirán "hey, este lanzamiento de invierno tiene demasiadas maldiciones y vamos a perder todo el centro del país". La directora de desarrollo de nuevos productos, Katie Frisina, amplía: "La honestidad brutal está en el corazón de las sesiones de tarjetas didácticas que ayudan a orientar nuestras ideas de nuevos productos. (Las) sesiones pueden volverse un poco ruidosas; a veces me pregunto qué pensarán nuestros vecinos en el edificio que estamos haciendo. Mucha risa, pero también pensamiento duro. El hecho de que todos pensemos que algo es divertido no significa que se venderá. Uno de mis momentos favoritos... es que Caitlin Nash casi siempre sugiere que hagamos un producto que diga 'I Beg Your Pudding'. Ella lo sugiere casi siempre. Ella es la única persona que votó sí. Todavía nunca lo hemos convertido en un calcetín, una manopla para el horno o un chicle, pero me encanta que siga intentándolo".

Comparaciones Shmarisons

Este sentido jovial, gozoso, de tercera clase en el Titanic de cuidado comunitario, propósito superior y respeto mutuo contrasta directamente con gran parte de nuestra actual cultura corporativa de arriba hacia abajo, quizás el ejemplo reciente más destacado sea el maximalista, Toma de control de Twitter por parte de Elon Musk. Mitch: "Mira cómo (él) tuvo este discurso público con sus empleados y decía 'Me voy a deshacer de la mitad de ustedes'. Creo que hay muchas personas descontentas que sienten que son solo una pieza, son solo una parte, son reemplazables, y probablemente podría estar trabajando para lograr algunos de los mismos objetivos al enmarcar lo que está tratando de hazlo diferente y no te quedes con mucha gente que tiene mucho resentimiento". Seth agrega: "Para mí, esa es una decisión comercial horrible. Acabas de comprar el lugar. Deberías entrar y pasar desapercibido por un rato y ver cómo va todo. Y sí, estoy seguro de que hay algunos procedimientos quirúrgicos". recortes que se podrían y se deberían hacer, pero ¿solo para despedir a la mitad de los empleados? La mitad que queda, se lo garantizo, está buscando trabajo”.

El espíritu lúdico y estéticamente sintonizado de Blue Q se parece un poco a Silicon Valley, pero sin la pretensión superficial que a menudo viene con la egolatría y las tácticas manipuladoras de contratación de esa cultura en particular. Seth llama a la suya "la versión BS: compras una mesa de futbolín y la pones en el lugar más obvio y llamas a eso "cultura". Mitch agrega que "Mi hijo está saliendo con alguien que trabaja en Google, y él puede entrar en su oficina y conseguir almuerzo gratis. Las ventajas son increíbles. Google sabe que la gente quiere que la mimen, pero la forma en que algunas empresas lo hacen es muy... como si pusieran carteles inspiradores en la pared o lo que sea, pero no lo hacen de una manera que sea creativa". Seth y Mitch no lo hacen. solo quieren que las personas sean creativas, quieren que tengan derechos.

Un aspecto crítico de la empresa, y un factor importante que contribuye a su cohesión interna, es el compromiso de Blue Q con las causas benéficas. Sheri Esco siente que "el aspecto más inspirador de la misión de Blue Q para mí es la cantidad que (la empresa) devuelve a varias organizaciones". Mitch brinda varios ejemplos: "Cuando comenzamos a hacer nuestras bolsas recicladas, comenzamos a dar el 1 % a Nature Conservancy y ahora también estamos dando algo de eso a la Asociación del Valle de Housatonic. Y cuando comenzamos a hacer calcetines, pensamos ' ¿A quién le podemos dar el 1% de las ventas de calcetines?' y nos reunimos con Médicos Sin Fronteras y dijeron 'seguro, trabajaremos con ustedes' y de hecho nos permitieron imprimir 'Médicos Sin Fronteras' en el empaque. Somos, creo, la única compañía en el mundo que en realidad puede hacer eso, pero ahora les hemos dado $ 1.6 millones o algo así. Y es realmente increíble que este producto esté haciendo una doble función".

Detrás de todo esto hay claramente un pilar fundamental, un código moral que une e informa las decisiones de la empresa, dotando de mayor peso a sus inclinaciones y actividades caritativas. Mitch continúa: "Somos muy conscientes de trabajar con fábricas que son lo que usted quisiera que fueran. Vamos allí, nos aseguramos de que no contaminen, que los trabajadores tengan buena iluminación, que empleen a personas con discapacidades". (Por cierto, Blue Q trabaja con Community Access to the Arts, mejor conocido como CATA, para traer trabajadores con discapacidades a su personal). Esta parte del trabajo es un atractivo clave para muchos empleados. Sheri concluye que "me hace sentir que estoy haciendo más que solo ganar un cheque de pago y agrega valor y propósito a mi trabajo diario".

Huele a espíritu de equipo

Esta cohesión se extiende a estratagemas internas innovadoras y proactivas diseñadas para maximizar el impacto de toda esta buena intención. Mitch comparte un ejemplo: "Hace varios años, nuestro gerente de almacén propuso que investigáramos las técnicas de manufactura esbelta, aquellas en las que Toyota fue pionera en los años 70 u 80, donde se reúne a un grupo de siete u ocho personas en talleres llamados "Momentos Kaisen". "y tú decides qué crees que puedes hacer mejor para evitar el desperdicio. Ya sea movimiento desperdiciado, inventario desperdiciado o lo que sea. Y la esposa de Seth, Mary, que trabaja en la recaudación de fondos, nos consiguió una subvención estatal para que una compañía viniera y hiciera una serie de estos episodios de "Kaisen" aquí en Blue Q". Tuvieron un enorme éxito y generaron cambios en la empresa que están aquí para quedarse: Mitch informa: "Abajo tenemos una cinta transportadora donde se empacan los pedidos. Dejamos de trabajar, desmontamos todo el aparato y encontramos una nueva forma de hacerlo mejor. E inmediatamente empacamos los pedidos como un 30 % más eficientemente".

Los hermanos Nash se aseguran de distinguir entre el tipo de protocolos de eficiencia que conducen a la redundancia y los ajustes del sistema que les permiten mantener lo que tienen y hacer que funcione mejor para todos: "Cuando esta empresa consultora entra y dice 'nosotros' "Te ayudaremos a ser más eficiente", decimos, "pero no para que puedas despedir gente. Ese es el trato. No estamos aquí para ayudarte a empuñar un hacha". En una era de despidos masivos y escasez de mano de obra, este tipo de de priorización de los intereses de los empleados se presenta como un bienvenido oasis de respeto y confiabilidad.

Cuando se le preguntó si considera que el modelo Blue Q es transferible a otros negocios en el condado de Berkshire (o más allá), Mitch cita a un crítico imaginario: "'No podrías lograr esto con Berkshire Gas'", pero insiste con un destello de control. exuberancia, "podría sacar una versión de eso. Hace años dimos una charla sobre cultura y alguien que había trabajado en un bufete de abogados se nos acercó y dijo: 'Nunca podría hacer lo que están hablando en nuestra ley firme' y yo estaba como 'sí, podrías'. Y sé qué bufete de abogados era porque habíamos estado allí, así que preguntan '¿qué harías?' Dije 'Iría a su vestíbulo y tomaría todas esas estanterías con los libros que nadie ha leído nunca, y tiraría todo eso a la basura y tomaría todos esos muebles antiguos y los tiraría a la basura también. cambiar cómo se ve y se siente tu lugar', pero estaban demasiado asustados. No tienes que llegar hasta el final. Hay algunas cosas que puedes hacer. Y creo que la gente tiene miedo al cambio, y eso los asusta. La noción de que el trabajo en equipo y la cultura colaborativa solo pertenecen a un contexto creativo o "chiflado" es quizás algo que deberíamos reexaminar".

Cat-pitalismo de mercado

Como un felino para la hierba gatera, las vicisitudes del mercado vienen arañando a todos en algún momento designado u otro. Mitch recuerda un ejemplo reciente en el que les entregaron la cabeza: "Hicimos cepillos de dientes y trabajamos muy duro en ellos. Tenían pequeños mensajes en ellos, pero a nadie le gustaban. La gente no regala cepillos de dientes tal vez, tal vez el contenido estaba mal, tal vez la gente no quería comprar algo que estaba hecho de plástico, tal vez era demasiado caro, lo que sea, pero el jurado llega muy rápido aquí y cuando algo no funciona, nos deshacemos de él y seguimos adelante. a lo siguiente".

Lo siguiente bien puede ser un éxito, y los hermanos tienen una racha regular de ellos, pero los días de llenar centros comerciales y tiendas minoristas y ver cómo entraba el efectivo están, si no han desaparecido, en peligro crítico. Seth cree que "la gente tiene expectativas mucho más altas, debido a Amazon, por ejemplo. En el pasado no había Internet, está bien, así que la forma en que nos llegaban los pedidos, créalo o no, era que los representantes escribían pedidos y los ponían en un sobre y enviárnoslos por correo. Ese estándar desapareció hace mucho tiempo. Todos los pedidos llegan electrónicamente ahora, por lo que un representante de ventas escribe un pedido en la tienda, lo tendremos cinco minutos después de que se vayan. , y la tienda espera que lo enviemos ese mismo día. Entras en Amazon, haces clic y dices: "Va a estar aquí en dos días". Bueno, nunca pensamos que alguna vez tendríamos que estar en ese nivel de velocidad y precisión, y nuestro almacén ni siquiera tenía una computadora en los primeros días. Ahora hay 40 personas allí. La logística es enorme".

El esfuerzo que Seth y Mitch han puesto en la cultura de su empresa también da sus frutos en el ámbito logístico, como explica Katie Frisina: "Después de más de diez años, todavía me sorprende la rapidez con que tomamos decisiones. Dedicamos tiempo a tomar Seguro que tenemos toda la información importante necesaria para tomar una decisión, pero no tenemos innumerables reuniones o comités para evaluar un problema u oportunidad". La prueba y el error son una parte integral del mandato operativo de Blue Q. Seth: "Desarrollaremos alrededor de 120 o 150 nuevos SKU (unidades de mantenimiento de existencias, es decir, productos individuales) por año, pero luego descontinuaremos la misma cantidad. Los que se venden al final, zzzhooop, ahí van, ya sabes, incluso si los amamos, si no están funcionando. Las tiendas siempre esperan algo nuevo... es una rueda de 'nuevo'".

Este tipo de crítica interna honesta, libre de ego por su apariencia y sonido, encaja perfectamente con las demandas de producción de un mercado moderno. Los hermanos también sienten que es importante mantenerse al día con las redes sociales y todo lo relacionado con la tecnología porque, como se imagina Seth, "esas personas (usuarios de las redes sociales) son sus clientes, y nuestro material es entretenido. Y si puede entretenerlos más a menudo, Es más probable que alguien diga, 'Oh, realmente me gusta eso, quiero comprar esto'. Por lo tanto, es lo mejor para nosotros, y puede ver tan pronto como hacemos una explosión web, el tráfico del sitio web, zzzhooop, es solo un gráfico que sube así y, como un reloj, vuelve lentamente a la línea de base dos días después. " El sentido de una narración, de un viaje, de una gran e incognoscible visión que se desarrolla ante sus ojos día tras día, es cada vez más un poderoso generador de ingresos; "También está sucediendo esto en el que la gente tiene mucha curiosidad sobre '¿quién hizo esto?' ¿Cuáles son las historias detrás de estas cosas? Tenemos una especie de audiencia de culto de personas que tienden a regresar una y otra vez y realmente les gusta saber sobre todas estas cosas que suceden aquí... dejaremos de trabajar un día y todo va la compañía, o hay una fiesta temática loca para alguien que se jubila. La gente de hoy quiere saber sobre estas cosas".

La cultura puede ser tu amiga

El gran experimento de Seth y Mitch ha estado funcionando durante más de tres décadas, y tienen una idea bastante clara de por qué. Cuando los empleados aman el lugar donde trabajan y aman por qué trabajan, no es necesario torcerse los brazos para que se presenten y den lo mejor de sí mismos. Esto incluso se extiende a sus billeteras. Mitch sonríe mientras habla sobre el "muy generoso plan de participación en las ganancias" de la compañía con la humilde satisfacción de un científico cuyos vasos de precipitados continúan mostrando los mismos resultados prometedores en múltiples muestras. "No es que las personas simplemente obtengan mil dólares adicionales. Puede ser una proporción muy significativa de los cheques de pago de las personas, por lo que es un incentivo para trabajar en Blue Q y la empresa está organizada como un ESOP, que significa Plan de propiedad de acciones para empleados. El las personas que trabajan aquí en realidad poseen acciones en la empresa". Es posible que no le sorprenda saber en este momento que Blue Q no tuvo ningún problema para encontrar y mantener al personal durante o después de la pandemia, ni tuvo ninguna dificultad para atraerlos de regreso a la oficina.

Por supuesto, todo se remonta al compromiso de los hermanos con la cultura y la comunidad, sin el cual su plan de participación en las ganancias, sus locas oficinas, su encantador arte mural, su fabuloso historial y sus ganancias anuales bien podrían colapsar en un montón de hierba gatera polvorienta. Y Seth probablemente celebraría eso: "¿si estás en un lugar que está lleno de cubículos y realmente no disfrutas estar en la oficina? Claro, prefiero estar en casa. Lo entiendo. Pero creo que entonces el problema es que tu empresa apesta. Lo siento". Mitch pone un punto fino a su éxito, atribuyéndolo a una idea única y monumental, una palabra sin la cual ningún esfuerzo humano es posible o deseable: "¿Estamos en el año 35, creo? Estamos diseñando nuestro nuevo catálogo y es como, estamos en 35, vaya, eso es una locura, pero en realidad se trata solo del grupo. El grupo, el grupo, el grupo".

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